martes, 27 de marzo de 2012

.....

No me cuentes historias que nadie ha sido capaz de creerse nunca, no me hables de tulipanes que echaron a volar un lunes cualquiera, no te sientas feroz por morder a un indefenso, no tientes al futuro hablando de ilusiones....
Mejor calla y disfruta del presente que te ofrezco. No te ofrezco paz, ni armonía, ni mamarrachadas budistas que hablen de un Karma y un equilibrio natural entre los chíes imaginarios de tu mente. Tampoco te ofrezco locuras inauditas con un final inesperado, ni paseos relajantes a la luz de la Luna, ni siquiera te ofrezco un buen vaso de vino....
¿Para qué?.
Yo sólo te ofrezco lo que tú quieras que te ofrezca. Tan sólo te brindo la oportunidad de que dejes de pensar por un momento en todas aquellas parafernalias que algún día algún samaritano te contó, tan sólo te brindo la oportunidad de que calles por un momento y grites si te apetece gritar. Tan sólo te ofrezco la oportunidad de que desdibujes tus preocupaciones, nubles tus ruinas personales y eclipses tus malas inquietudes.


Tan sólo te exijo que dejes de pensar en todo aquello que prescinda de tu atención en este momento, y que te centres tan sólo lo que a ti te apetezca.....
¿Suena bien? .Adelante.




miércoles, 21 de marzo de 2012

¿Por qué???

¿Por qué habla el Sol cuando tiene que callar?, ¿Por qué queda muda la Luna cuando tiene algo que decir?.
Y es que cuando aparece la niebla y ennegrece el camino, es cuando, no lo dudes, se pondrá a llover...
Resulta que sí, que tienes una meta, que la ves, que se acerca, que se aleja, que se mueve...pero sabes que está ahí, en tu punto de mira.

Se ha ido, bueno en realidad no se ha ido, has dejado de querer verla, se ha esfumado de tus inquietudes y es que ¿que sentido tiene perseguir algo que ha perdido su luz...?.

Y es que la blanca luz se ha tornado en gris, en una luz manchada por el egoísmo y la desidia...

No, no estoy hablando de ninguna clase de maldición medieval, ni de ningún conjuro pagano, ni quiera me refiero a la luz como tal.
Me estoy refiriendo a que cuando algo apesta, huele mal,  y es ese el caso de este planeta en el que a nadie le importa nada, en el que la bondad se resume en la opinión del vecino y en el que las ratas llevan traje y corbata.

Sí, hablo del puto planeta tierra, y de sus podridos habitantes, manipulables, amargados, sin sueños ni esperanzas, hablo de habitantes cansados de vivir, que como viruela contagian ese tedio...
Maldito y horrible tedio, eres tú el que mancha las ilusiones con tu estúpido color marrón; Color marrón rutina, muy semejante al color del abono natural, y con un olor sorprendentemente idéntico. Eres tú el que apesta y contamina las más bondadosas ideas y merma la imaginación de las personas para hacer de ellas exactamente lo que se espera....absurdas marionetas de cartón, fáciles de mover, de romper y corromper.

Anda Sol, habla lo que tengas que hablar, pero que sepas que algunos preferimos escuchar al viento...

Abre los ojos, sal de la oscuridad



Abre los ojos poco a poco, sal de la oscuridad, con cuidado, no te precipites. Poco a poco se va colando la luz en tus pupilas, es fuerte, radiante, te ciega.

No eres capaz de de ver, la oscuridad ha desaparecido pero ahora es la luz la que no te permite vislumbrar.
Paulatinamente tus ojos se acostumbran a la luz, y progresivamente se va dibujando ante ti un paisaje. Va tomando forma, despacio y comienzas a ver.

Es lo más bonito que has visto en tu vida, ahora se deja ver, y sabes, no, estás seguro, mejor aún, no lo puedes negar. No puedes negar que ya no quieres seguir viviendo si no es ante aquella imagen.

Son tus sueños, sueños de libertad plasmados en un estampado casi pictórico. Y te gritan, te gritan que abras tus alas y vuelvas a su lado, que alces el vuelo y te prepares para fundirte con aquel estrámbotico aunque esplendoroso paisaje.

Radiante edén de sueños que te incitan de forma magnánime.

Ya no dudas, no lo has hecho nunca, sabes lo que quieres. Así que te lanzas, abres tu alas, impaciente, con fuerza, ansioso por volar, si...
Coges impulso, te abalanzas hacia delante, y reforzado por tus alas, saltas, con fuerza, con ganas, convencido.
Pero no vuelas, ni avanzas, ni caes, ni te mueves, ni flotas en el aire, ni te fundes con tu libertad ni con tus sueños...

No ha pasado nada de eso, ¿por qué?. Miras hacia abajo, sorprendido, anonadado, confuso... Y las ves, riéndose de ti a carcajadas, brillando por su efecto, jactándose de tu libertad.
Estúpidas cadenas....

No puedes hacer nada más, así que la observas, grandiosa e inalcanzable...

Preferiría no haber abierto los ojos.