martes, 27 de noviembre de 2012

donde nacen las pesadillas


Abrí los ojos para poder ver una vez más, miré atenta hacía la distancia para discernir algo de paz, quise pensar, quise sentir, quise ojear una única cosa que me secuestrará en la más absoluta de las oscuridades y que me dejase allí, y que me enterrase para siempre en un lugar cuyo nombre nadie conoce.
Un lugar pútrido y oscuro, un lugar donde las mariposas son negras y las rosas sólo tienen espinas, un lugar donde viven lo sapos y cantan las brujas.
 Ese lugar donde mueren los sueños, y ese lugar donde nacen las pesadillas.Quise quedarme allí, quise quedarme a escuchar los más horribles cánticos jamás creados, y a componer el llanto más triste jamás cantado, quise formar parte de la melodía más fúnebre jamás sonada.....
Pero al abrir los ojos no vi nada, no discerní algo de paz, no pensé, no sentí, no ojeé aquella cosa que me secuestrase en aquella oscuridad. Nada de aquello sucedió, simplemente me encendí un cigarrillo, me serví una copa y me quedé mirando una pared blanca...Luego me dí cuenta de que aquello no estaba tan mal.

Aprendí a mirar la oscuridad, y cuando la empecé a entender, me quedó constante que no hay más oscuridad que la que uno quiera ver.